“Pron escribe desde los puentes que van de la literatura a la realidad y de regreso. Y ahí se mantiene, aún a riesgo de perder una presencia mediática que en última instancia ni siquiera le importa. Sabe perfectamente que quien duda de sí mismo se disuelve en el mercado de la época. Lleva consigo esa voluntad de resistencia que siempre admiró Lezama Lima, es capaz de mirar con la misma humanidad que Sebald, la inteligencia de Félix de Azúa y el sentido del humor de Dylan. Es un escritor global pero no en el sentido de que imite formas y procesos de producción propios del mercado, sino porque ha aprovechado absolutamente cada fragmento de conocimiento que ha tenido la oportunidad de recabar.” [Sigue leyendo]

La Tempestad (México), enero de 2024.