“Este es un libro sobre la huida de Edward, que determina por completo la vida de su hija Olivia y de su esposa Emma, que comenzarán desde entonces a buscarlo, a extrañarlo y a intentar sobrevivir con su ausencia. Este es un libro sobre perderse, sobre dejar de estar ahí donde todos te pueden encontrar, sobre dejar de estar disponible. Y también sobre el intentar encontrarse a sí misma justamente en ese espacio nuevo donde te dan por perdida. Este es un libro sobre deambular, sobre lanzarse a una ruta desconocida, aleatoria, errática. Un libro sobre caminar fuera de la norma, lejos de la linealidad euclidiana, probablemente en un tiempo fractal, en una danza en espiral. Este es un libro sobre el arte como una expresión de ese abandono a la norma, de esa diferencia que te expulsa de la ruta recorrida por la mayoría, que te aleja del patrón, del acto banal de la ejecución literaria, escénica, visual, musical que alimenta vorazmente plataformas, redes sociales, algoritmos, vitrinas. Este es un libro sobre fantasmas y desapariciones. Sobre un padre que ya no está, pero cuya ausencia ocupa un pesado espacio en el presente. Es un libro sobre los restos. Y es también, y aquí me quiero detener, un libro sobre el bosque. Sobre nuestra inquietante atracción hacia él.” [Sigue leyendo]

Revista Anfibia, enero de 2024.