“Vivo en España desde hace 12 años, pero no recuerdo haberme preguntado con frecuencia durante ese periodo qué significa ser español. Supongo que el hecho de que mis principales interlocutores lo fueran, de que yo no tuviera intenciones de volverme uno y de que, naturalmente, no viera a mis parejas y a mis amigos españoles como tipos nacionales invalidaba la pregunta, aunque no la curiosidad, que me llevó una y otra vez a descubrimientos algo inquietantes. Las ‘caras de Bélmez’. Los Chorbos. Las rotondas. La expresión ‘joder la marrana’. Un ejercicio de la política basado en la descalificación personal y no en el intercambio de propuestas. El significado de las siglas EGB. Y el refrán ‘o follamos todos, o tiramos a la puta al río’. Aunque también algunas otras cosas bastante más útiles, al margen de la evidente utilidad de saber cómo se llamaba el barco de Chanquete, en especial si se ha bebido alcohol y a partir de ciertas horas de la noche.” [Sigue leyendo]

El País Semanal, marzo de 2021.