“‘La figura del autor es enfatizada debido en gran parte a que es mucho más fácil vender autores que obras’, afirma Patricio Pron (Argentina, 1975). El autor, agrega, ha sido en cierta forma cómplice de las circunstancias que han contribuido a que la literatura esté muriendo en cierta forma, por lo menos desde los últimos doscientos años. ‘Creo que los escritores hemos sido responsables de una cierta inopia, responsables de que, más en este periodo que en otros, no parezca necesario leer libros para acceder a un conocimiento más específico del mundo’. La otra forma de complicidad que el escritor argentino distingue es bien conocida en México. ‘Se pone de manifiesto en cierto tipo de autores que han decidido convertir a la literatura en un medio y no en un fin, autores que han hecho de la literatura un medio de acceso a la gestión de gobierno o al funcionariado, ven la literatura como una forma de aproximarse al poder y tan sólo necesitan producir periódicamente textos para ser reconocidos por ese poder, sin que necesariamente esos textos se impongan o se sostengan por sí mismos’.” [Sigue leyendo]

El Excélsior, 31 de julio de 2014.