“El narrador no juega a la autoficción que tan bien empleó Javier Cercas en Soldados de Salamina, ni a la enumeración monstruosa del Bolaño de 2666. Su estrategia es, en cambio, más compleja y más sencilla […]: sumerge al lector directamente en un sofocante ejercicio de supresión de la realidad y la lógica. Mencionábamos más arriba la cuestión del Absurdo como herramienta o catalizador; y al emplear este concepto, debemos necesariamente pensar en Samuel Beckett mientras leemos Nosotros caminamos en sueños; pero también pensamos en El arcoiris de gravedad, del brillante Thomas Pynchon —con la que comparte la sensibilidad y un muy particular sentido de lo cómico, así como ciertas dinámicas en el tratamiento de los personajes—, en Vicente Huidobro y, por ende, en Nicanor Parra […], así como a la obra de teatro de Fernando Arrabal Pic-nic, cuya descripción de lo bélico se filtra a través de la infantilidad, que también emplea Pron.” [Sigue leyendo]

 

Nosotros caminamos en sueños, de Patricio Pron

Revista Vísperas, 27 de mayo de 2016.